
ROMANTICISMO
SIGLO XIX

El ansía de libertad
El Romanticismo es una reacción en contra del Neoclasicismo. La libertad creativa desplaza a la razón ordenadora.
La exaltación del yo individual
En el siglo XVIII neoclásico, con el despotismo ilustrado, la voluntad del rey se imponía sobre la opinión de sus súbditos. En cambio, los postulados de la revolución francesa (libertad, igualdad, fraternidad) hicieron variar la situación. Ellas fueron las ideas inspiradoras del Romanticismo, que propugnó una intensa valoración de la propia personalidad.
El espíritu de rebeldía
Las ansias de libertad se traducen en un espíritu de rebeldía, que se observa en numerosos personajes literarios, todos ellos aventureros y rebeldes.
Sentimiento de soledad y de resignación al sufrimiento
El fatum romántico proviene de un emparentamiento con la cosmovisión cristiana medieval.
Identificación con la naturaleza
La naturaleza en su estado puro, no se trata de una naturaleza de jardín sino de una naturaleza guardadora de secretos en la que pueda proyectar su estado anímico.
Exaltación de la imaginación y del sentimiento
El romántico muestra su valor en la firmeza de sus sentimientos. Es un caballero en una gesta del corazón. Por otro lado, su imaginación le pone alas a su sentimiento amoroso.
Valoración de lo nacional y popular
Tal como el hombre romántico necesita afirmar su yo, las naciones precisan destacar los valores propios que las diferencien de otras comunidades humanas y las identifiquen.